Tras pasar más de 25 años dirigiendo mi propia clínica veterinaria, ahora, recién pasado el testigo a mi equipo, me preguntaban qué había sido lo más difícil y lo más gratificante durante esa larga etapa…

Sin duda, las PERSONAS.

En primer lugar,  mis empleados y seguido muy de cerca, los clientes.

En el vídeo de hoy te paso un consejo de veterano, con más kilos, menos pelo pero un poco más sabio por la edad.

Con toda humildad, es de lo mejor y más auténtico que puedo ofrecerte.

Un abrazo,

Miguel Ángel

PS: Por cierto, a las mascotas no las incluyo, ellas fueron siempre una bendición.